Se derramó por completo,
los azules resbalaron tiñendo aquel lienzo,
salieron desde su alma impregnados de infinitos deseos.
Hoy recuerda aquel día como si sucediera en este mismo momento, aquellos fueron los inicios de todo, ya no más rutina, se cansó de sentir que perdía aún el tiempo.
Un grito amarillo rompió los violetas desgarrando las sombras y despedazando el silencio. Lo iluminó de esperanza ya es tiempo de mostrar mi pedazo de mundo, de contar mis verdades..., de expresar lo que siento.
Sus manos vacías repletas de sueños dispusieron las formas cuál hada encantada, náyade al viento, transformando el espacio algodonado de hilo en ideas mutables tejidas de universo.
Circunferencias concéntricas rodando incansables, la perfección de la inercia sin límites ni fin,el principio donde nada comienza.
Unas manos eternas y todopoderosas sosteniendo el mundo. Desprendiendo magia, derramando sueños.
Manos suaves y ágiles acariciando amores, repletas de ternura,
y cargadas de pasiones.
Ahora manos agotadas, secas y agrietadas, deformadas,
desprendiendo dolor.
Manos creadoras esperando el momento.